2 de diciembre de 2008

Capítulo 16

Capítulo 16.- El tiempo lo dirá

La semana de clases había terminado, era sábado… ahora Inuyasha salía con una chica de su salón… a decir verdad era muy bonita… los había visto alguna vez en la universidad…pero… y ella ¿Qué podía hacer al respecto?... nada, absolutamente nada, no podía interponerse, lo sabia bien, el solo la besó por que ella lo obligó a hacerlo o ¿fueron los efectos del alcohol?…en realidad, eso ya no importaba… y quizás, ese beso no significo nada para él, solo fue otro más, pero para ella… lo significo todo… no era su primer beso, pero fue el único que la hizo sentir de esa manera
Ya había pasado un mes desde eso… y aún no podía olvidar la sensación que le provocó unir sus labios, esto iba mal…
Suspiró con pesadez… y se deslizó en la pequeña mesa de la esquina de la cafetería donde trabajaba su amiga
- últimamente has estado viniendo mucho- se acercó a su amiga
- si tanto te molesto puedo irme- retomó su postura inicial
- ¿ahora te haces la indignada? Mira Kagome… se que estas así por… Suikotsu…- se sentó frente a su amiga, su turno ya había terminado y ahora solo esperaba que pasaran por ella.
- ¿Suikotsu?- preguntó frunciendo el ceño- ¿el que tiene que ver?
- ¿no era la persona que te gusta?
Ahora se daba cuenta, Sango no sabía a quien amaba… desde el principio pensó que era su amigo y no Inuyasha… era lo mejor…
- no estoy segura…-mintió, era la única forma de que su amiga no preguntara más
- vamos, no esta nada mal… a demás tiene un estilo único- rió
- si, tienes razón
¿Formar una relación con Suikotsu? No, en realidad no era lo mejor, lo sabía bien, no arreglaría nada y solo terminaría lastimándolo… ¿Qué podría hacer? ¿Cómo lo olvidaría? Al final solo el tiempo lo diría…
Se escuchó a lo lejos la campanita del local sonar, anunciando la entrada o salida de las personas, la castaña quedó mirando a la entrada con los ojos brillantes, lo que hizo que ella la siguiera, se fue acercando hasta donde ellas estaban
- Hola lindas señoritas- recargó su brazo en la pared
- eres un bufón Miroku- rió la castaña, mientras el recién llegado tomaba asiento junto a ella
Tenía unos días que Sango estaba saliendo con el amigo de su medio hermano… esa última palabra era como un balde de agua helada cada vez que la pronunciaban sus amigos, era demasiado doloroso.
- Kagome, ¿estas bien?- la voz de su amiga la hizo salir de sus pensamientos- hace unas semanas que estas muy rara
- estoy bien… solo son los estudios- suspiró resignada- tengo que ponerme al corriente
- es cierto- dijo para sí- ¿has visto a Inuyasha?- miró a Kagome
Bajo la cabeza y negó, tomó fuerzas- no, no lo he visto…
- que extraño… cada vez que le marco al móvil me dice que esta con una tal… - se tomó la barbilla pensando-…Yura
Pero que inoportuno era Miroku…
- tengo que irme- dejo unos billetes
- espera Kagome, también nos vamos nosotros- se paró y jaló a Miroku de la mano y los tres salieron de la cafetería
El chico pasó el brazo por el cuello de Sango
- ¿A dónde vas?- preguntó su amiga
- no lo se…- rió con un poco de nervios
- nosotros vamos al cine, ¿no quieres acompañarnos?
- pero Sango…-esta lo miró con ojos asesinos que hizo al chico de ojos azules retractarse- ven con nosotros Kagome
- no, gracias pero tengo que hacer otras cosas… además no me gustaría ser mal tercio- fue dando pasos hacia atrás- adiós, que se diviertan
Giró sobre sus tobillos y caminó, aún era de día, quería tardar un poco más en llegar a la mansión, pero al parecer no había otra opción
Sacó una cajetilla de su mochila, los observó, dudaba si tomar uno o no, le había hecho una promesa a Inuyasha… pero recordó sus palabras “no fumes, aunque sea en mi presencia”
Cuando su boca probó de nuevo el sabor a tabaco se relajó, la nicotina había sido su única adicción, hasta ahora…

================oOo================

Ella sabía que no podía controlar el tiempo, pero y si lo hiciera… por más que ahora este sufriendo, no hubiera cambiado nada de lo que pasó…Entro al baño de su habitación, se quitó la ropa y cubrió su cuerpo con la bata de baño… las gotas de agua quizás la ayudarían a olvidar por unos momentos, siempre lo hicieron, pasó lo que tuvo que pasar… ¿Qué pasaría con el amor que sentía?... solo y únicamente el tiempo lo diría

0 comentarios: